En las dinámicas de las sociedades actuales donde las jornadas de trabajo son extenuantes, las tareas se multiplican y el cansancio es el pan diario, lo que se persigue y anhela es un momento de relax, de desahogo y distracción donde puedan coincidir placeres de la vida y el descanso, así lo idearon en Japón los dueños de un spa, construyendo piscinas de vino, chocolate, te, sake y café.
El lugar se llama Yunessun Spa Resort y desde que inició actividades siempre busca innovar con diferentes entretenimientos para sus visitantes, donde puedan relajarse y conseguir beneficios para su salud.
La piscina de café con agua termal ofrece además de grandes antioxidantes para la piel, un alto nivel de relajación gracias a su aroma. El olor del café ha demostrado tener el poder de penetrar el cerebro humano y despertar estímulos que mejoran las capacidades cognitivas, optimizando la atención y el análisis.
Además de estos beneficios, el contacto de la piel con el café mezclado con agua termal, ayuda a combatir la fatiga, alimentando las primeras capas de la epidermis causando un efecto tensor por lo que estos baños también son vistos como tratamientos de belleza.
Por todo esto, el spa japonés es ahora referencia turística y desde hace un tiempo se debe reservar para poder disfrutar de estas piscinas. Sin embargo, aún no se conoce que otros Spa en Japón u otro país haya replicado la idea. Queda demostrado que el café despierta tantas pasiones que ninguna idea se quede corta y se puede asegurar que seguirán surgiendo muchas otras iniciativas sorprendentes con base en el café.