Emprender también es sinónimo de superar miedos, algunos temen al cambio, otros a dejar la estabilidad de un trabajo fijo, pero quien ha emigrado ya no tiene ese tipo de miedos y se arriesgan buscando alcanzar el equilibrio que alguna vez tuvieron.
Así es la historia de Carolina y Serbulo, una pareja extranjera que hace 2 años se inició en el mundo del café con Mikka´s Coffee, una cafetería en pleno centro de Providencia, “En Venezuela trabajamos en turismo, acá también, pero siempre tuvimos en mente que lo que queríamos era un negocio propio, y cuando comenzó la pandemia vimos la oportunidad de hacerlo”.
Cuenta Carolina qué, aunque ya no tenían miedo a lo nuevo, si lo tenían a tomar créditos de los bancos, “siempre nos gustó el café, nada como sentarse después del trabajo y pasar a tomarse uno, conversar con un café, no sabíamos mucho del rubro pero tener una cafetería era lo que queríamos, conseguimos el local y sacamos créditos bancarios para poder comprar equipos, pagar arriendo y arrancar y hoy puedo decir que lo logramos”.
Carolina explica que, aunque su cafetería tiene una excelente ubicación, al principio fue difícil, pues comenzaron junto con la pandemia y siendo extranjeros sin experiencia en el mundo comercial chileno, temían no lograr las ventas que necesitaban para mantenerse estables.“
Hoy, después de 2 años que iniciamos me gustaría decirle a todos los que piensan arrancar cualquier emprendimiento, que si realmente es una decisión tomada que se arriesguen y lo hagan, no hay nada mejor que sentirse que logras mantener una meta, siempre conscientes que hay días buenos y días malos, que se trata de estar determinado a insistir y persistir siempre”.
Por último, comentó que, aunque la situación económica del país no es la misma de hace dos años, si se puede lograr, que se trata de conseguir la necesidad y explotarla.
