El Café y sus diferentes mezclas han dado pie a diferentes tipos de bebidas, dependiendo de la cantidad de agua puede ser espresso o americano, combinado con leche puede ser un latte, un cortado o un capuccino, con chocolate un mocaccino, pero pocos se atreven a hacer mixturas con frutas, y sí, se puede preparar café con frutas.
Aunque pueda resultar arriesgado y atrevido, muchos baristas tienen años ideando recetas donde incorporan frutas al café, y es que aunque el café parezca estar muy distante de lo que se tiene concebido por fruta, la cereza del café es una fruta más.
Ahora bien, el que sea una fruta no hace el café fácil de combinar con los sabores de otros frutos, la recomendación de los especialistas es hacerlo con frutas que no sean muy ácidas ni muy húmedas, descartando así el kiwi y los frutos rojos pero dando luz verde a la manzana, el plátano, el higo, la piña, la pera, las ciruelas, las moras y los cítricos.
Quienes lo han preparado, afirman que la mejor manera de hacer una unión de fruta con café es mediante la cocción, pues facilita su incorporación en la bebida. También puede agregarse la fruta seleccionada durante el proceso de infusión, incluyendo trozos de fruta con el café molido.
Incorporar frutas a los cafés tradicionales también sirve para darle tonos diferentes, al agregar frutos secos a un capuccino su sabor se intensificará, y si se busca un café frío tipo frappé la incorporación de alguna fruta fresca le dará una textura única.
El café con sus infinitas formas y maneras de prepararse seguirán sorprendiendo pero finalmente será la curiosidad y gusto personal el que definirá cómo y con qué acompañarlo